DESPEDIDA EN SOL.
Recuerdo con cariño aquella noche:
Puerta del Sol, las dos de la mañana.
Tú esperabas un taxi y la tristeza
asomaba filtrándose en tus ojos.
Nos esperaba el cielo y la distancia.
Un lazo nos ceñía
con palabras de adios y hasta muy pronto
y un abrazo sincero de amistad
despedía las luces de la plaza.
Luego subiste al coche, silenciosa.
Yo me quede muy quieto contemplando
cómo dos luces rojas
se alejaban irremediablemente.
(c) Mayusta.
2 comentarios:
Es un poema con mucha nostalgia. Hermoso a la vez. Enhorabuena Miguel Ángel. Un saludo, Isabel Montero
Muchas gracias, Isabel, por tus palabras generosas. Un saludo.
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