El ocaso se pierde e la penumbra
Aparece la reina de lo oscuro,
y me visto de sombra
con un manto de olvido.
Todo a mi alrededor se sosiega y espera
a que se duerman los postreros pájaros.
En esas horas lentas que separan las luces
deseo ser el amo del tiempo,
para reflexionarlas y sentirlas.
En la duda de mis afirmaciones
está la oscuridad
y quiero dirigirme
hacia la luz, final del laberinto.
y quiero dirigirme
hacia la luz, final del laberinto.
De silencio y luz. (Lastura, 2015)
5 comentarios:
Tú me has callado a mi con tus palabras...Genial.
Un beso
"...En un final de oro y cristales, llega el matiz que abre el corazón" Y es que los matices son los que consiguen abrir el abanico de los colores.
Como siempre tu poesía es delciosa leerla. No sólo tiene letras, también tiene música.
Un abrazo poeta.
Vengo un ratito contigo a disfrutar, en silencio, de tu poesía.
Un beso.
La noche el noray donde amarradas quedan las respuestas.
Un saludo, encantada de enlazarte y haber coincidido en Vilapoètica
Un poema magistral de un magistral poeta que tiene el don de poner alas sonoras en cada verso y convierte la oscuridad en un remanso de sosiego.
Un beso.
Publicar un comentario